El pasado viernes, cerca de 40 corredores y corredoras de
diferentes sexos, edades, club, autonomías
y especies se dieron cita en la quinta quedada nocturna y clandestina villana, que
sirve para dar el pistoletazo de salida a una temporada que promete ser
entretenida.
No hubo que lamentar perdidas “importantes” de atletas por
el campo, todos y todas salieron y llegaron a las pistas de atletismo en un intervalo de 50 a 80 minutos, sin daños aparentes y visibles.
Sobre
el circuito de unos 10.300 metros hubo quien marco en su strava 9.800 y quien se fue en su garmin a
10.800 por circunstancias de cruces de caminos o despistes ocasionales propios de runners. Pero al
final todos y todas lo celebramos con un rico aperitivo nocturno. Las circunstancias
fueron propicias para que tod@s est@s "atletas circunstanciales" se divirtieran.
Palabra de pronador.
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