Tres mochuelos en apuros.

Crónica de Eduardo Lozano.

La teoría:

Habíamos quedado a las 6:45 en Lidl, un buen madrugón, no es que la carrera comenzase muy temprano el tema estaba en que por muchas vueltas y revueltas que le diésemos al mapa llegar hasta Condemios suponía casi 2 horas de viaje. La salida se daba a las 10:30 pero en Prádena de Atienza, al otro lado del macizo de Alto Rey, hasta donde la organización nos  llevaba en bus, siempre que estuviésemos allí a las 9:30.  En teoría parecía fácil. Por lo menos para el “trio calavera” como nos llamaba José en el blog, curtidos en este tipo de campañas campo a través por lugares recónditos y distancias sin homologar.

  

La realidad:           

A esas horas el tiempo corre muy deprisa, salí de casa a las 6:10 con la sensación de que llegaba tarde. Sabía que llevaba el deposito un poco bajo, pero ,,, bueno,, luego un poco más adelante no vaya a ser que pille otra vez el control en la Cepsa, mejor tomo el desvío por Meco.

En Azuqueca me esperan Manolo y Carlos, comentamos un poco las posibles variantes, que si por Atienza, por la CM101 o por la NII y al final optamos por la más directa que es la CM1008, o sea la de la “patata”. Tranquilos que nos sobra tiempo.

Lo de que un hombre no puede hacer dos cosas a la vez puede ser un tópico pero en mi caso tiene algo de verdad. Por lo menos si una de las cosas es hablar. Se había encendido la luz ámbar del depósito la altura de Alovera y al cabo de un ratillo de ruta me pregunta Manolo que para los temas serios es bastante consecuente.

-          Oye, Edu para cuantos kilómetros te da la reserva?

-          No sé, ponle unos 50. Si estoy pendiente, en la próxima gasolinera paro.

-          Pero es que por aquí no vamos a encontrar ninguna ¡!!  y debemos llevar ya casi 40, a Condemios no llegamos.

Vale si, teníamos un problema. En Cogolludo peguntamos a algún paisano y a base de indicaciones y navegador localizamos una en Espinosa.

-          Y si esto se para.

-          Puff si se para, si se para un domingo por estas carreteras,,, puffff.

Como en las comedias, en que unos tipos con buenas intenciones la acaban liando parda, se nos fue enredando cada vez más y más la madeja. En Espinosa había gasolinera pero por ser festivo no abrían hasta las 9:00. Desesperación, intentamos Jadraque y lo mismo hasta las 9:00, resignación. A Manolo le teníamos ya un poquito “rayao”, le gusta ser puntual y parecíamos destinados a llegar tarde a todo.

-          El bus lo perdemos.

-          No pasa nada, vamos directamente a Prádena,  ya veremos cómo volvemos luego desde Condemios.

-          Vamos a tomar un café y esperamos a las 9:00

La Carrera:

Desde Jadraque la ruta hasta Prádena no se dio mal. Muchas curvas, carreteras estrechas, bonitos paisajes y nos ahorramos bastante kilómetros de nuestro destino inicial en Condemios. Llegamos casi los primeros cuando estaban los organizadores montando el arco de salida y no habían empezado a distribuir los dorsales. Durante el trayecto habíamos podido contemplar todo el perfil de la montaña con sus características antenas en la zona más elevada.

Los primeros 7 km los empleamos en alcanzar la cima del Alto Rey, hasta el mirador donde hay una ermita y los conjuntos de antenas de comunicaciones. La subida no tiene excesiva pendiente pero hay que añadir la dificultad de que se hace a media ladera, sin camino o sendero. Hubo un incendio hace pocos meses, el suelo y el matorral tiene un color ceniza que le da un aspecto de superficie lunar.

En general si tuviera que destacar algo que la diferencie de otras “medias” de montaña como el Ocejón o Somosierra sería que una buena parte del recorrido se hace monte a través.  Hay unas cuantas marcas o indicaciones en árboles y piedras de por dónde ir pero no una traza sobre el suelo. Es bastante más agreste y complicada. De las de que si te distraes te pierdes fácilmente. Somos pocos corredores y en algunos tramos no llevas a nadie ni delante ni detrás.

La parte final tiene un poco de todo, hay hierba, tierra, una zona de ramas y troncos, alguna trampa y unas zonas de pradera y bosque muy bonitas. Los avituallamientos bastante bien organizados, no faltó de nada.  Al terminar además la inscripción incluía la comida (dos platos, postre, bebida  y café) en un albergue – colonia que utilizan para campamentos infantiles a las afueras de Condemios donde se hizo también la entrega de premios.  Unas instalaciones bastante completas, no se puede pedir más, un 10 para los organizadores.

La Fortuna:

Los tres villanos habían completado la primera transición de su triatlón particular, que era llegar a  Prádena en coche, también la  segunda de Cross a pie hasta Condemios pero y la tercera …

-          Y ahora como volvemos.

-          Vamos a preguntar si alguien baja o nos deja cerca de la salida.

-          O nos volvemos otra vez andando.

-          Si, 15 kilómetros sin saber si nos vamos  a perder. Vete a saber dónde terminamos.

A Manolo no le vendíamos lo de volver por el monte, se temía que la íbamos a liar más y casi prefería tirarse a la carretera y hacer dedo hasta donde nos quisieran llevar.

Tampoco le vendíamos a nadie lo de volver a Prádena y después de varios intentos llegamos a la conclusión de que no iba a ser fácil,  está al fondo de un valle y es final de carretera, ninguna ruta para regresar hacia Guada pasa por allí y un Domingo por la tarde a punto de anochecer se debe quedar casi desierto.

Si conseguimos resolver el entuerto fue gracias a que Gregorio Cortijo de C.A. Brihuega se ofreció a llevarnos, él conocía bien la zona y ya nos dijo que había que dar una vuelta de unos cuantos kilómetros, por la mañana el autobús había tardado casi 45 minutos.

Se lo agradecemos los tres de todo corazón porque le metimos en un problema que no era suyo y al que nos habíamos lanzado sin saber cómo salir.  

Un Abrazo  

23 km. 81 Llegados a meta.

   

Pos	Nombre	Cat	Pos/Cat	Tiempo	Puntos
18	Carlos Serrano Aguilar	Senior_M	8	2:23:49	29
43	Manuel Briones Barragán	Vet_M	18	2:44:38	26
50	Eduardo Lozano Valverde	Vet_M	22	2:51:38	23